Actualmente nos encontramos inmersos en una transición hacia un modelo energético cada vez más limpio y accesible. En este sentido, el autoconsumo es ya una realidad imparable que ha llegado para quedarse y que afecta a todos los ámbitos de nuestra vida, entre ellos la movilidad. Conscientes de esta situación cada vez más usuarios optan por adquirir vehículos con un perfil más sostenible, entre ellos, los eléctricos, lo que trae consigo nuevas necesidades de carga. En este contexto, la energía fotovoltaica es la que realmente da sentido a la movilidad eléctrica, algo que no solo beneficia al medioambiente sino también a nuestros bolsillos. Sin embargo, a la hora de dar el paso suelen surgir dudas como ¿Cómo podemos cargar un coche eléctrico con energía solar? ¿Qué tipo de instalación se requiere? ¿Qué aspectos debemos tener en cuenta?